Esta es una propuesta del Grupo de Redes Sociales de la Policía Nacional para que padres de hijos menores de 13 años fijen con ellos por escrito unas normas de buen (seguro, privado, respetuoso) uso de su móvil, tablet, ordenador o dispositivo conectado a Internet, a pactar entre todos cuando se vaya a comprar o estrenar un nuevo gadget para el chico/a.
Permitir la entrada del teléfono móvil en clase fuera del proceso de enseñanza-aprendizaje no solo no es beneficioso sino que afecta de manera especial a los alumnos con bajo rendimiento. Es lo que indica un estudio británico de la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres, que ha recopilado datos sobre expedientes, porcentaje de adopción del teléfono móvil entre jóvenes en edad escolar y la prohibición creciente del uso del teléfono en centros escolares de Reino Unido.
Lejos de acompañar los resultados la idea de que permitir el teléfono en clase de nuevo reduciría las desigualdades en clase, como está pasando en lugares como Nueva York, el estudio saca otras conclusiones: mientras que los mejores alumnos no ven afectados sus resultados por la presencia del teléfono móvil en clase, los que tienen peores resultados empeoran los suyos.
Muchas veces tendemos a llamar al sistema operativo como Linux porque resulta más corto o más cómodo, y no siempre con mala intención. Pero si lo hacemos, estamos cometiendo un error y despreciando el trabajo detrás del proyecto GNU. Linux es solo un kernel, el núcleo del sistema operativo y que, a pesar de ser una parte muy importante, necesita de otros complementos para funcionar como un sistema operativo.
Por tanto lo correcto es denominar al sistema operativo GNU/Linux. Y desde nuestro blog queremos pedir disculpas si a veces hemos cometido este error en el pasado. A partir de ahora, llamaremos al sistema como GNU/Linux y cuando nos refiramos al kernel como Linux simplemente.
En 2006, las Naciones Unidas, a instancias de la II Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información celebrada en Túnez, declaró que el 17 de Mayo sería el Día Mundial de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información. En esta fecha se celebra también el “diadeinternet”, un proyecto en red promovido por iniciativa de la Asociación de Usuarios de Internet, con objeto de dar a conocer las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías y promover el acceso generalizado a Internet.
Para la celebración, se organizan en toda España congresos, jornadas, seminarios, actividades de formación, concursos, juegos en red y muchos otros actos sobre los que se informa en la web oficial del evento.
Para terminar el trimestre nuestros alumnos de 4º de la ESO del Colegio Pablo Vi van a aprender nociones básicas sobre el desarrollo de aplicaciones para teléfonos móviles.
Después de iniciarse en la programación de aplicaciones multimedia con Scratch han recibido entusiasmados esta nueva iniciativa, basada en la herramienta MIT App Inventor.
Durante esta semana los alumnos de 4º de Primaria del Colegio Pablo VI han participado en el concurso promovido desde la Agencia Nacional de Protección de datos:
La iniciativa está orientada a colegios y tiene como objetivo fomentar el conocimiento del derecho a la protección de datos y el valor de la privacidad entre alumnos de 10, 11 y 12 años.»
Hace unos días os ofrecimos una selección de páginas web con tutoriales y cursos para la placa Arduino, con la que podemos crear virtualmente cualquier proyecto de hardware y software abierto. Hoy vamos a ver otra alternativa a estos proyectos, también de bajo coste pero centrada en el software: la Raspberry Pi.
Este pequeño ingenio, que podemos encontrar a la venta en su web oficial o en Amazon, puede convertirse en un reproductor multimedia o hasta en un termostato. Con un poquito de programación y personalización de su sistema operativo, te puede salir cualquier cosa. Sigamos el rastro del material que hay disponible online y veamos algunas webs con cursos donde dar los primeros pasos.
Ya estás escuchando y leyendo mucho sobre ello pero pero irá a más. Nos referimos al Internet de las cosas, toda una realidad con muchas promesas por delante que es posible gracias a tecnologías que se han ido desarrollando en estos últimos años.
Partiendo del término inglés IoT – Internet of Things -, estamos rodeados de pequeñas redes y nuevas tecnologías que tienen una única finalidad: conectar el máximo de objetos que nos rodean, entre ellos y con nosotros.
Hoy me ha surgido un problema con una de las aplicaciones que uso con los chicos en el aula. Una de esas que tienen opciones para descargar complementos, insertar publicidad, o llevar un seguimiento remoto de la actividad realizada con el programa.
Está claro que no me interesa que los chicos añadan/descarguen nada que pueda afectar al uso para el que se pensó la instalación de dicho programa, o que les bombardeen con publicidad nada apropiada para su edad, ni que sepan las veces o no que utilizo la herramienta o de que manera. En MS Windows bastaría con aplicar reglas específicas en el cortafuegos, pero ¿cómo lo hago en Linux?