Gestión de cookies

Consentimiento

Este sitio utiliza cookies técnicas y de rendimiento. Puede acceder a la información detallada sobre nuestras cookies o modificar sus preferencias pulsando sobre "Obligatorias / Otras".

Obligatorias

Cookies obligatorias/necesarias: Estas cookies son necesarias para el funcionamiento del sitio web y no pueden ser desactivadas de nuestros sistemas. En general, sólo se establecen en respuesta a acciones realizadas por usted que equivalen a una solicitud de servicios, como establecer sus preferencias de privacidad, iniciar sesión o rellenar formularios.

Cookies utilizadas: PHPSESSID

Otras

Cookies de terceros: Algunas partes del contenido mostrado en este sitio web pueden proceder de fuentes externas, las cuales pueden incluir sus propias "cookies". Específicamente:

Youtube: vídeos incrustados (utilizando youtube-nocookie para mejorar la privacidad. - (ver su política)


Resuelve el cruzigrama de la educación


Oración del día



Evangelio del domingo: Lc 21, 5-19

The Chosen Ya disponibles episodios finales de temporada 5 - DIARIO  CRISTIANO

En el evangelio de este domingo encontramos las siguientes palabras de Jesús:

"Yo os daré palabras y sabiduría a las que no podrá hacer frente ni contradecir ningún adversario vuestro".

Reflexión:

Imagínate que vas a hacer un examen o que tienes que explicarle a un amigo por qué no quieres hacer algo que sabes que está mal. En esos momentos, es fácil ponerse nervioso, olvidar las cosas que sabes o que te tiemble la voz. Jesús sabía que a veces nos sentiríamos así, como si estuviéramos solos.

Por eso, Él nos dice: "Yo os daré palabras y sabiduría."

Esto es como si Jesús te diera un botón secreto. Cuando sientas miedo de hablar, de dar tu opinión o de defender a alguien, solo tienes que respirar hondo y pedirle en tu corazón: "Jesús, dame Tus palabras".

Al hacerlo, Él te va a llenar la mente de claridad y el corazón de calma. No se trata de que sepas todas las respuestas, sino de que lo que digas, lo digas con verdad y fuerza, con la bondad que viene de Él. Nadie podrá hacerte sentir mal o dudar de lo que es correcto si lo que dices viene de la mano de Jesús.

Así que, recuerda: cuando necesites valor para hablar, no estás solo. Jesús es tu consejero personal y te dará justo las palabras que necesitas.