El iPad como rey de las escuelas tiene rival: Google y sus Chromebooks

Desde su debut, hace cuatro años, el iPad siempre ha tenido la vocación de convertirse en el futuro de los libros de texto. Su implantación en las escuelas, especialmente en Estados Unidos, no ha sido para nada mala, pero a la tableta de Apple le ha salido un competidor que sube tan rápido que ya le ha tomado la delantera: los Chromebook de Google.

ipad_chromebook

Según datos de la consultora IDC sobre el tercer trimestre del año, Google acaba de sobrepasar en ventas al iPad en el mercado educativo (715.000 chromebook frente a 702.000 iPad). Los Chromebook ya suponen una cuarta parte de los dispositivos que se usan oficialmente en las aulas. No es una cifra nada desdeñable teniendo en cuenta que llegaron más de un año después que el iPad al mercado.

La derrota es doblemente dolorosa si tenemos en cuenta que el último distrito que ha decidido pasar del iPad en favor de los Chromebook es el de Los Ángeles, el segundo mayor de Estados Unidos, con 640.000 estudiantes.

No se trata solo del precio (que también). Los Chromebooks tienen otras ventajas. La primera es una cuestión de percepción. Como apunta The Atlantic en un artículo sobre la adopción de Chromebook en los centros de Hillsborough, en Nueva Jersey, los alumnos perciben el iPad como un dispositivo de entretenimiento para navegar, ver cine o jugar. Los Chromebook, sin embargo, son vistos más como un equipo de trabajo. La propia presencia de un teclado convencional hace más fácil utilizarlo en clase por periodos prolongados.

Otro factor importante a favor de los Chromebook son las aplicaciones, especialmente la posibilidad de utilizarlas de manera colaborativa. Google ha puesto mucho esfuerzo en facilitar esto con el lanzamiento de versiones para la educación de sus apps online. El ecosistema de Google es, en líneas generales, más sencillo de gestionar, y su uso ya está universalmente extendido.

Por supuesto, no todo es de color de rosa para Google. La necesidad de estar conectado a una red WiFi para sacar todo el provecho a la plataforma Chrome OS suscita algunas preocupaciones en los profesores. Otro aspecto en el que aún hay que mejorar es el de la seguridad y privacidad. El año que viene será, a buen seguro, testigo de una batalla cada vez más encarnizada entre Google y Apple por la conquista de las aulas. En el fondo no es una cuestión de marcas ni precios, sino de dos filosofías de producto bastante diferentes.